Los empresarios consideran que reducir el gasto público y reformar la educación son claves para impulsar la competitividad.

El presidente de CEOE, Juan Rosell, ha señalado que las reformas realizadas hasta ahora eran absolutamente necesarias, pero les ha faltado intensidad y ha añadido que se debe legislar menos y mejor, durante su intervención en el acto de inauguración del Congreso de la Asociación de Empresas del Gran Consumo, AECOC, celebrado hoy en Barcelona.

Por su parte, el presidente de AECOC, Javier Campo, que ha intervenido también en el acto de inauguración del citado Congreso,  ha manifestado que  “estamos en un círculo virtuoso de crecimiento” y que “el consumo está creciendo por encima de lo que podíamos esperar hace un año”. Este encuentro del Gran Consumo, al igual que en otros años, reúne a más de mil primeros ejecutivos de empresas nacionales e internacionales del sector para tomar el pulso a su evolución. 

En la positiva valoración de la evolución de la economía española coincidieron tanto Rosell como Campo.  Reconocieron síntomas de recuperación, si bien destacaron la necesidad de seguir apostando por las reformas estructurales que impulsen la competitividad y, en consecuencia, garanticen la confianza en nuestra economía, del todo fundamental para mantenernos en la senda del crecimiento. 

Javier Campo, por su parte, estimó en 5 años el tiempo necesario para aliviar los dos grandes desequilibrios de nuestra economía: el paro y la deuda, situando así en 2020 el despegue económico.

Gasto público y Educación

Los empresarios del Gran Consumo, consultados en sala mediante un sistema de votación interactivo, demandaron, en este sentido, la reducción del gasto público (41%) y la reforma de la educación para mejorar la empleabilidad (31%) como reformas clave para mejorar la competitividad de nuestra economía.

Javier Campo resaltó la importancia de que la reforma educativa “salga del debate político, partidista y sectareo en el que está. Tiene que ser producto de un Pacto de Estado que garantice continuidad”. En su opinión, “todo lo que no hagamos ahora en Formación, lo pagaremos en calidad de vida y salarios bajos”. Por su parte, Rosell señaló que “en las empresas, cuando hay problemas, reducimos gastos. Pero en las Administraciones Públicas no se ha hecho, ni aquí ni en el resto de países europeos”.

Ambos directivos también apuntaron las reformas laboral, fiscal y la innovación como ejes de la recuperación. Según Campo, “los empleos que genera el mundo digital no tienen nada que ver con los de las fábricas del siglo XX y, por tanto, hay que flexibilizar el mercado laboral”.

Europa como alternativa

A la hora de analizar las oportunidades y amenazas futuras, tanto Javier Campo como Rosell consideraron la inestabilidad política como uno de los principales riesgos para mantener la senda de la recuperación. En opinión de Rosell, “Europa es nuestra alternativa, nuestra solución. Es un contrasentido que en pleno siglo XXI alguien quiera hacer fronteras locales”.